"La Huella Digital de los Alimentos" nace como una iniciativa de transición digital dentro del sector agroalimentario con el objetivo de asignar una huella a cada producto agroalimentario con el fin de verificar, asegurar la calidad y la trazabilidad de éstos, desde el origen hasta el consumidor. 

Pero, ¿cómo creamos esas huellas?

Para ello, hacemos uso de la Resonancia Magnética Nuclear (RMN) y la Inteligencia Artificial (IA). Esta aproximación destaca por su precisión, fiabilidad, reproducibilidad y economía. Gracias al uso de la IA, la información queda digitalizada (banco de Huellas Digitales), permitiendo que la información pueda viajar por toda la red agroalimentaria. Con este enfoque, conseguimos una transformación profunda de la cadena de valor, convirtiéndola en una red agroalimentaria digital, bidireccional, integrada, inteligente y sostenible, acercando digitalmente a consumidores y productores, objetivo de la Agenda 2030.